Esta
mañana se ha corrido la voz de que el juez había imputado al concejal de
Urbanismo de Lorca, José Joaquín Peñarrubia, por haber permitido que las
licencias de obras de reconstrucción las firmasen ingenieros en vez de
arquitectos.
El
Ayuntamiento ha salido al paso de inmediato, convocando una rueda de prensa
extraordinaria en la que Peñarrubia ha negado este extremo y ha justificado su actuación
y la de los técnicos municipales.
Lo
que vienen a decir es lo siguiente: al Ayuntamiento le presentaron una petición
de licencia de obras que estaba firmada por un ingeniero industrial, y no por un
arquitecto. El consistorio devolvió esa petición para que subsanasen esa
deficiencia, y entonces alguien -el ingeniero, según me informan desde el
Ayuntamiento- les denunció a ellos. Por eso el juez ha imputado al concejal y a
los técnicos: para ver qué pasa.
Yo
supongo que, si la ley dice que las licencias sólo las puede firmar un
arquitecto, la firma del ingeniero técnico no vale para nada, a estos efectos.
Es como si lo firmo yo o El Jipy, dicho sea con afecto hacia ese trabajador que
no tiene nada que ver con urbanismo.
Reproduzco
la información difundida desde el consistorio.
La Ley de Ordenación de la Edificación, los informes jurídicos y técnicos
de los servicios municipales y de la Abogacía del Estado respaldan la actuación
del Ayuntamiento
16 de octubre de 2013. El Concejal de Urbanismo del
Ayuntamiento de Lorca, José Joaquín Peñarrubia, ha explicado esta mañana en
referencia a su próxima (comparecencia) en sede judicial, que se trata de un
caso de obra sin licencia administrativa.
Hablamos
de un edificio ubicado en el barrio de San Cristóbal que solicitó licencia de
obras para su refuerzo estructural tras los daños causados por los seísmos.
Dicha licencia, que de acuerdo a lo marcado por la Ley de Ordenación de la
Edificación tiene que estar firmada por un arquitecto, estaba firmada por un ingeniero industrial. Tal circunstancia se le puso
de manifiesto a los solicitantes para su subsanación.
Peñarrubia
ha indicado que este asunto se deriva de una divergencia de competencias entre
técnicos. La obligación de este Ayuntamiento es velar por la seguridad de los
ciudadanos y de las edificaciones, al margen de discusiones administrativas. Es
la Ley, y no el Ayuntamiento, la que determina que una obra de este tipo tiene
que firmarla un arquitecto, no un ingeniero industrial.
Desde
el Ayuntamiento de Lorca han explicado que no es una decisión de este Concejal,
sino de la Junta de Gobierno Local, fundamentada en los informes de los
servicios jurídicos y técnicos de este Ayuntamiento.
Contamos, además, con un
informe al respecto de la Abogacía del Estado, que concluye, literalmente que
“no aprecia que sea ilegal la decisión del Ayuntamiento de Lorca que, con base
en los motivos expuestos en los informes citados, deniega la licencia para la
ejecución de las obras mencionadas”.
El
Concejal de Urbanismo ha ratificado “nuestra plena confianza en la acción de la
justicia, anticipando que ofrecemos nuestra total colaboración y máxima
transparencia. Todo lo que hace este Ayuntamiento en el plano urbanístico es
absolutamente legal, y así va a seguir siendo. Cumplimos escrupulosamente con
la Ley, y de ahí no nos mueve nadie. Lo primero son los ciudadanos y sus
derechos, los intereses corporativistas no nos van a hacer cambiar. Si alguien
trata de sembrar dudas, se equivoca”.
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