martes, 22 de marzo de 2016

Atentados en Bruselas: el ejemplo de "Le Monde"

         Los -más que presuntos- atentados en el aeropuerto y el metro de Bruselas, cuyo balance definitivo aún se desconoce en el momento en que redacto estas líneas, me hacen precipitarme sobre las páginas del diario francés Le Monde, como he hecho en otras ocasiones en las que la barbarie terrorista ha golpeado otras zonas de Europa.
         Os adelanto que yo no tengo ni idea de francés, ni leo la prensa extranjera, pero hoy en día los traductores de Internet hacen milagros; no quiero que esto parezca postureo ;)
         Voy a hacer unas pequeñas reflexiones como periodista, no como analista político. Por eso voy a prescindir, dicho con respeto, de las víctimas de los posibles atentados, de sus causas, y me voy a centrar en la forma, no en el fondo: en cómo debe reaccionar un medio de comunicación cuando se lía parda.
         Cuando se produce una calamidad como la que se está viviendo en Bruselas, Le Monde da información viva, en directo, a través de su página web www.lemonde.fr. Pero además complementa esta información con un chat en vivo, que se actualiza cada pocos minutos, donde responde a las peticiones de información concretas de los lectores; a lo que realmente le interesa a los lectores, además de las cifras oficiales.
         Por poner algunos ejemplos, extraídos de su chat y pasados por un traductor automático:

-Se habla sólo de un solo atacante suicida, ¿se confirmó esto?
-¿Ha sido reivindicado el ataque?
         -¿Podemos pensar que estos ataques se producen en represalia por la "captura" de Abdeslam o estaban ya previstos?

         En estos casos, al ser un diario francés que habla de un atentado en Bélgica, las preguntas no descienden a un nivel tan doméstico como el que pude leer, por ejemplo, tras los atentados de París de finales de 2015. En aquellos momentos, los lectores de Le Monde pudieron obtener información sobre aspectos como si la calle Tal estaba acordonada, o si se había suspendido la línea X de autobús. Cuestiones que para una persona atrapada en el cataclismo pueden ser vitales.
         A este respecto, quiero recordar la actuación ejemplar que tuvo la televisión autonómica 7 Región de Murcia, y en concreto el editor Alejandro García-Villalba, tras los terremotos de Lorca de 2011.
Como quizás algunos sepáis, en aquella época yo era el corresponsal de esa televisión en Lorca. A los pocos días, viendo lo perdidos que estábamos todos, le pedí a Alejandro que me dejase incluir en los informativos pequeñas noticias informando, por ejemplo, de que la farmacia de la calle Tal había prolongado su horario hasta medianoche para atender a las víctimas, o que los asegurados de la Mutua X tenían que entregar los partes de baja en las oficinas de la Mutua Z porque sus oficinas de siempre estaban con alerta de derribo. Una información que a lo mejor no procedía en una tele regional -¿qué le importará a un señor de Cieza cuál es la farmacia de guardia en Lorca, y viceversa?-, pero que ayudó realmente a los damnificados, prestando un servicio público. Y que creo que es la obligación de cualquier medio de comunicación que quiera prestar un servicio: prescindir de escaletas de diseño y bajar al barro, a los escombros, a ver cómo pueden echar una mano.
Como digo, Le Monde amplía el concepto de "información en vivo" abriendo un chat donde se responde al instante a las dudas concretas de los lectores, individualizando de hecho la información... pero además tiene la prudencia de que esa inmediatez no vaya en detrimento de la calidad. Es decir, por decirlo finamente, que no pierde el culo por dar cualquier rumor como hacen otros más acelerados.
Fijaos qué respuestas (insisto en que las estoy pasando por un traductor automático; de ahí esa sensación de encorsetamiento):

-Por ahora, no se puede establecer ninguna conexión entre la detención de Salah Abdeslam, principal sospechoso de los ataques del 13 de noviembre en Francia, y los ataques que se produjeron hoy en Bruselas.
-A pesar de que la detención de Salah Abdeslam tuvo lugar cuatro días antes de los ataques de hoy, nada nos permite decir en este momento que los eventos tienen ninguna conexión.

Una lectora impaciente les echa en cara esta prudencia, e indica que otros medios están dando una información "más actualizada": mirad entonces el diálogo que se establece:

-Su conexión en vivo realmente va con retraso...
-Hola, Julie; nosotros estamos publicando aquí sólo la información que recibimos y la confirmación de nuestras propias fuentes. En el pasado hemos aprendido a desconfiar, durante estos grandes eventos, de la información publicada por todos lados por fuentes de menor reputación que la nuestra. Por lo tanto, nos comprometemos a no entregar aquí nada más que datos confirmados, lo que en efecto puede tomar su tiempo... Gracias por su comprensión.



Así debería ser en todos los casos. No publicar nada que no se haya confirmado a través de una fuente fiable y contrastar la información hasta estar seguro de que es fiable.
O, si no es posible, mencionar de dónde sale la información para que sea el propio lector el que decida hasta dónde se la tiene que creer. Por ejemplo: "el concejal de Seguridad de Bruselas dice que hay 12 muertos".
Claro que esto no sale barato. A preguntas de un lector, Le Monde informa del dispositivo que ha desplegado sobre el terreno:

-¿Tenéis equipos en el lugar? Gracias.
-Hola, Cyr. Nosotros contamos ahora mismo con tres periodistas sobre el terreno en Bruselas: nuestros dos corresponsales, Cecile Ducourtieux y Jean-Pierre Stroobants, además de nuestra enviada especial Florence Aubenas, que ya estaba en la capital cuando ocurrieron los ataques. Otros dos periodistas van en camino.


Cinco periodistas; dos de ellos enviados ex profeso y una tercera que ya estaba allí y a quien sin duda habrá que pagarle alguna dieta, aunque me imagino que esa compañera no se lo planteará.
Mirad: no hay buen Periodismo sin periodistas. ¿Es caro pagar cinco sueldos? Por supuesto; pero los lectores de Le Monde reciben información en vivo; y no cortapegas interesados, apresurados, repetidos o incompletos. Sólo esa diferencia ya le tiene que compensar a quien tenga una empresa de comunicación, igual que a un buen carnicero le debe compensar vender carne de primera, y no pasada.
Si pones a un solo periodista a hacer el diario entero, le condenas al cortapega y a la noticia rápida. Por muy profesional que sea. Tiene una hora de cierre, tiene cinco, diez, quince páginas para llenar... y tiene que buscarse la vida.
Pero es que aunque no sea por una cuestión de ética... al empresario inteligente le compensa que su periódico vaya bien. Haciendo las cosas bien, con una buena plantilla y dando información de calidad, te ganas a infinidad de personas. Tus lectores se multiplican; publicar anuncios en tu medio saldrá más caro porque habrá más compradores potenciales... y las nóminas se acabarán compensando.
De la otra manera, a la tercera pifia y en temas tan gordos, la gente dejará de leerte; te quedarás sin anunciantes, y acabarás teniendo que echar el cierre. Luego le echarás la culpa a que "la gente ya no lee"... pero no, hijo. No te leerá a ti, que eres un chapuzas y recortas en lo esencial: en rigor.
Personalmente, la manera de actuar de Le Monde es un ejemplo profesional para mí. Ojalá cundiera también el ejemplo entre los responsables de los medios de comunicación, los que recortan alegremente buscando el beneficio inmediato y cutre. Y entre los propios lectores: estamos viviendo tiempos en que cualquier web, cualquier panfleto, es objeto de cita y de retuiteo. No buscamos que la Prensa amplíe nuestras miras y module nuestro criterio; buscamos que confirme nuestro análisis y refuerce nuestros prejuicios. Y así nos luce el pelo.




viernes, 18 de marzo de 2016

La "prohibición" de la Semana Santa de Murcia

         Ayer por la tarde me metí en Twitter y empecé a ver comentarios muy indignados de gente que protestaba porque los de Podemos pretendían suprimir la Semana Santa de la ciudad de Murcia. Como quizás sepáis, se trata de un evento de Interés Turístico Internacional -igual que la de Cartagena y la de Lorca-, que destaca entre otras cosas por sus Salzillos.
         Las protestas se agrupaban bajo la etiqueta #SemanaSantaRM, y en ellas se alternaban dos posiciones: unos defendían la laicidad; otros lamentaban la inminente desaparición de la Semana Santa de Murcia de la mano de Cambiemos Murcia, una coalición municipal de izquierdas en la que hay personas de Izquierda Unida y provenientes de Podemos que en aquellos momentos estaba presentando una moción a este respecto en el Ayuntamiento de Murcia.
         Lo primero que hice fue sumar. El Ayuntamiento de Murcia tiene 29 concejales, que se reparten de esta manera:

         PP 12 (incluyendo al alcalde, José Ballesta)
         PSOE 6
Ciudadanos 5
Ahora Murcia 3
Cambiemos Murcia 3

         Las cifras eran contundentes. Cambiemos Murcia debería sumar a su cruzada anti-Semana Santa a los tres concejales de la coalición de izquierdas Ahora Murcia -posible-, a los seis del PSOE -altamente improbable- y a otros tres concejales, bien de Ciudadanos o del PP...
         Mientras yo hacía estos cálculos, los tuiteros seguían lamentando la desaparición de la Semana Santa... y aun más, la plaza y las calles próximas al ayuntamiento y la catedral empezaban a llenarse de gente armada con banderas de España y carteles en defensa de la festividad y en contra de la laicidad, lo que hacía que otros tuiteros de otras partes de España se llevasen las manos a la cabeza. En el paroxismo de los sentimientos empezaron a llegar personas armadas con tambores que, desde luego, no batían en son de paz.
         Viendo que la polémica aumentaba hice aquello que cualquier periodista está obligado a hacer: CONFIRMAR la información acudiendo a fuentes fiables. Y qué mejor fuente que la propia coalición Cambiemos Murcia. Un artículo del diario La Opinión exponía el contenido de la moción que se estaba sometiendo a votación en el pleno; pero además este periódico incluía un vídeo en el que el concejal Sergio Ramos hablaba directamente a cámara y nos lo contaba.
         En dicho vídeo, cuyo enlace adjuntaré al final de este artículo, el concejal de Cambiemos Murcia exponía claramente lo siguiente:
         1. No pretenden prohibir la Semana Santa de Murcia.
         2. Quieren que el Ayuntamiento, como tal, no la lidere: que no haya representación institucional de un Ayuntamiento que representa a todos los murcianos, y no sólo a los católicos.

         Pero esa moción iba más allá:
         3. Se niegan a que el Ayuntamiento siga cediéndole gratis espacios públicos a entidades religiosas.
         4. Piden que la Iglesia pague el IBI como hacen casi todas las personas y entidades del país.

¿Era falta de tiempo y de ganas de informarse lo que sacaba a la calle a cerca de un millar de murcianos?
         ¿Había una mano negra interesada en crispar los ánimos para alejar el fantasma del pago de impuestos?
         ¿Nos hemos crispado tanto, que basta con escuchar la palabra "Podemos" para que saltemos airados, poniéndonos la venda antes de tener la herida?
  
         Como no tengo datos que respalden estas tres preguntas lo dejaré correr. Haciendo, eso sí, una advertencia: los periodistas tenemos la obligación profesional de confirmar la información acudiendo a una fuente directa, si es posible. La fuente existe; el diario La Opinión lo hizo y nos sacó a muchos de la duda permitiéndonos además beber de la fuente original. Supongo que otros medios también lo harían, pero no hice el seguimiento exhaustivo. Durante la tarde de ayer leí muchos comentarios de profesionales del Periodismo dando por bueno que "los de Podemos" iban a prohibir la Semana Santa de Murcia.
         Ni podían prohibirla, porque necesitaban una mayoría de votos inalcanzable, ni lo pretendían, como pudo comprobar cualquiera con ganas de informarse antes de salir a la calle o desahogarse en Internet.
         Este enlace a la web de La Opinión permite ver el vídeo donde el concejal de Cambiemos Murcia nos cuenta lo que pretendían. Aquí se tenía que haber venido antes de liarla.


        

         Como era de esperar, y según informa La Opinión, la moción por la laicidad -y por el pago de impuestos, no lo olvidemos- fue derrotada con los votos en contra de PP, PSOE y Cs, mientras que Ahora Murcia se abstuvo.

miércoles, 16 de marzo de 2016

Vídeo homenaje al bordado lorquino


         Amigos, sin más preámbulos quiero compartir con vosotros este modesto vídeo de homenaje al bordado lorquino. Lo he compuesto a vuelapluma, basándome en las fotos que he sacado en los últimos años y en la galería de imágenes de mi productora, Númera Audiovisual.
No pretende ser nada más que un breve repaso a estas obras de arte, en seda y oro, confeccionadas por las manos de las mujeres lorquinas durante generaciones. Ahora que por fin llega la Semana Santa estas joyas saldrán de las vitrinas de los museos y desfilarán en procesión para deleite de lorquinos y visitantes.

         Un saludo y, ¡que viva la Semana Santa de Lorca!



miércoles, 9 de marzo de 2016

Alhama: un ejemplo de democracia directa

         El movimiento se demuestra andando... y la apuesta por la participación ciudadana se demuestra votando. Durante todo el día de hoy, los vecinos de Alhama están pasando por las urnas para escoger la nueva ubicación de un instituto.
         Los colegios e institutos públicos, tanto del casco urbano como de las pedanías, han abierto sus puertas para que los alhameños elijan la nueva ubicación del IES Valle de Leiva. Se les da una primera opción: mantenerlo o no en la zona de Nueva Espuña. A continuación se les pregunta cuál de las siguientes opciones les parece más apropiada, El Praíco o La Cerámica.
Existen además unos dossiers accesibles a través de Internet con planos detallados de estas tres zonas de Alhama y los solares donde se podría construir, con otros datos como son la superficie del solar, los accesos, los lugares importantes de interés, si habría que proceder a alguna expropiación, y una serie de pros y contras firmados por los técnicos, no por los políticos.



         Además de anunciarlo oficialmente, y de convocar a los vecinos, el alcalde Diego Conesa está participando de manera activa en Facebook, respondiendo dudas y debatiendo sobre el tema con los vecinos.

El alcalde de Alhama, votando esta mañana
(foto: Ayuntamiento de Alhama, Gabinete de Prensa)

         A las dos de la tarde ya habían votado cerca de 1.600 vecinos, según los datos aportados por el propio Ayuntamiento. No está mal. El censo electoral de Alhama en 2015 superaba los 21.000 habitantes, pero habrá que tener en cuenta que estos datos no son extrapolables a las elecciones legislativas, ya que se ha abierto las urnas a los mayores de 16 años. Además, supongo que sólo irán a votar aquellos vecinos directamente vinculados a la comunidad educativa -alumnos, padres, abuelos-.

         Una jornada histórica, que no sé si se habrá hecho con anterioridad en algún municipio de España -el Ayuntamiento dice no tener constancia de precedente alguno en la Región de Murcia- y que espero que se extienda en otros municipios y para otras ideas. En ocasiones nos quejamos de que los políticos pinchan y cortan sin pensar en los vecinos; que no pisan la calle y no saben cuáles son las necesidades reales de los ciudadanos. En este caso, en Alhama, los vecinos han podido decidir sobre un tema tan importante como la ubicación de un instituto; un ejemplo de democracia directa.