En el artículo anterior habíamos
hablado de una temporada agrícola que no
ha estado mal, y de los abusos que están sufriendo quienes apostaron por la
energía solar, animada por un Estado que al final les ha dado la puñalada.
La asamblea general de COAG Lorca del
pasado viernes nos puso en guardia frente a otras amenazas para el sector
primario. Vuelvo a decir que no me imagino a Francia dejando que les hundiesen
el sector quesero o el de los vinos, o a los alemanes lamentándose en vano de
que otros países les obligan a cerrar sus empresas. Pero aquí estamos viendo a
diario cómo nos hunden en sectores en los que somos importantes. Entran otros,
nos quitan lo que tenemos, nos condenan a la ruina para siempre... y nuestros
Gobiernos sonríen, cuentan la feria como les da la gana y dejan que la riqueza
nacional se pierda y se vaya fuera.
Ganadería
Vicente Carrión, responsable de
ganadería de COAG de la Región de Murcia, anunció algunas noticias positivas
para los productores:
- COAG quiere coordinar a todos los
técnicos de sus distintas oficinas: Lorca, Murcia, Cartagena, Yecla,
Caravaca... quieren que haya una buena coordinación para que cuando un ganadero
tenga un problema, el que sea, le pueda ayudar el técnico más apropiado, sea de
su oficina o de otra.
- En la próxima edición de la feria
internacional porcina Sepor 2013 (septiembre), se van a hacer jornadas
nacionales de porcino con la participación de diversas personalidades de
referencia en Europa y en el mundo entero.
- También habrá en Sepor una jornada
regional de ovino, que es una cabaña en la que van a hacer mayor hincapié. Participará
en ella una mujer que ocupa un alto cargo en el ministerio de Agricultura y que
está muy vinculada a la PAC.
- La COAG ha conseguido rebajar el
precio de la retirada de los cadáveres de animales en las explotaciones. En
concreto, se ha conseguido reducir 4 céntimos por cada kilo de cadáver, con
independencia de la especie. Según la COAG, el ministerio ha reconocido que la
Región de Murcia es la autonomía donde al ganadero le sale más barato retirar
los animales muertos.
La PAC
El presidente de COAG de la Región de
Murcia y de Lorca, Miguel Padilla, dio algunos apuntes sobre la reforma de la
Política Agrícola Común (PAC), que es algo donde el Estado debería plantarse y
defenderse como gato panza arriba, pero que en realidad supone un retroceso
para España cada vez que hay una reunión.
Me estoy imaginando a Marruecos
vendiéndole a buen precio a la ONU los sacos de harina y las frutas con las que
alimentarán a nuestros nietos cuando nos hayamos convertido en Etiopía.
¿Exagero? ¿Estamos haciendo algo para defendernos?
Vamos a ver las informaciones que dio
Padilla.
A fecha de hoy, los agricultores y
ganaderos españoles no tienen ni la menor idea de cómo les va a afectar la PAC
al 100%: ha habido una reforma aprobada en Bruselas, pero esta reforma le da a los
Estados un margen muy amplio de maniobra. Todavía no saben cómo va a aplicar
España ese margen que le conceden desde Europa. De ahí, entre otras razones,
que el propio Padilla no se atreviese a anunciar el próximo presupuesto con el
que cuenta la COAG, porque hay una inseguridad grandísima. Y gravísima.
Los presupuestos de la PAC cubren el
período 2014-2020, aunque quizás se aprueben ya en 2015. El dinero que se prevé
es semejante al del período anterior (2007-14), pero desde esa fecha el poder
adquisitivo español ha bajado cerca del 13%. Es decir, que te dan el mismo
dinero pero las cosas han subido un 13%. Empezamos bien.
En cifras, se prevé que España obtenga
más de 5.000 millones de euros al año. Habrá que ver cómo lo reparte el Estado.
La COAG prevé que el dato se conozca a fin de mes. La Región de Murcia podría
obtener unos 108 millones de euros, destinados casi la mitad (53 millones) a
fondos operativos de las cooperativas.
En cualquier caso, la COAG prevé llevar
a cabo asambleas informativas a partir de septiembre.
El reparto
de las ayudas
Hay varias maneras de ayudar a los
productores: por ejemplo, pagando por lo que cultivan, o viendo cuántos
terrenos tienes y dándote un tanto por cada hectárea. La COAG se opone a este
último sistema, que es el que se impone a la hora de percibir las ayudas, y que
beneficia a muchos terratenientes que tienen las tierras baldías.
Según sus datos, en España hay 904.000
perceptores de la PAC, pero sólo 350.000 cotizan a través de la Seguridad
Social Agraria, que es lo que identifica a los agricultores en activo.
Además, hay otros 200.000 perceptores
que reciben menos de 1.000 euros en ayudas; esto es, que tampoco son
agricultores en activo puesto que ese poco dinero indica que no es su actividad
principal.
Hay gente que cobra cerca de 4 millones
de euros en ayudas; algo que a la COAG le parece excesivo.
Desde la COAG defienden un reparto de
las ayudas que beneficie a aquéllos que realmente tienen en el sector primario
su actividad económica: por ejemplo, poniendo un techo de ayudas (100.000 -
150.000 €), para evitar subvenciones excesivas, y exigiendo que los grandes
terratenientes coticen a la Seguridad Social Agraria: de esa manera, la parte
apropiada de las ayudas irá al beneficio común.
Parece ser que el pago se va a seguir
haciendo por tierras. Por poner el ejemplo de siempre, que es real, la Casa de
Alba se llevará una millonada, incluyendo las dehesas que tiene abandonadas. No pagan al que se dedica al campo, sino al
que tiene campos.
Para el reparto de ayudas de la PAC, se
va a dividir a España en 40 zonas (regiones), que no estarán unidas físicamente
sino agrupadas por la media de ayudas que reciban.
Por poner ejemplos al azar: resulta que
los productores de Lorca reciben una ayuda media de 6.000 euros de la PAC; que
los de Mula reciben también esos 6.000; que los de Badalona, Getafe, El Ejido,
Bilbao... reciben de media esos 6.000 aproximadamente. Entonces se agrupa a
todos esos municipios en una zona: la zona de los 6.000 euros. Y sobre esa zona
se actúa de manera unitaria, dándoles lo mismo y exigiéndoles lo mismo. Se
quiere hacer 40 zonas, así que se harán 40 franjas, desde la media más baja
hasta la más alta.
La COAG cree que puede aprobarse un
Plan de Desarrollo Rural a nivel estatal, paralelo a los autonómicos; lo que, a
su juicio, puede ayudar a las regiones más pobres. Piensan asimismo que no se
prevén mermas importantes de derechos para cabañas como la ovina o la caprina.
Un detalle importante, que parece
surrealista: los aeropuertos ya no recibirán ayudas de la PAC. Y es que ese
reparto de ayudas por hectárea de terreno había llegado a esos esperpentos. Se
ha hecho un listado de lugares que no son campos -parece de chiste-, y se ha
excluido a los aeropuertos... aunque también se ha excluido a los invernaderos.
Algo que no tiene ningún sentido, que puede perjudicar a los productores, que
se va a pelear para que se corrija... y que demuestra que muchísimos expertos no
tienen ni la menor idea de cómo está la situación en el campo. Más que expertos
son enteraos, que es una condición
muy peligrosa.
Acuerdos
preferenciales
Uno se asocia a los sitios para tener
ciertas ventajas. Hace alianzas con otros colectivos para defenderse juntos
frente a los que se quedan fuera... salvo en el caso de la PAC. Atención,
porque por aquí nos va a venir la ruina:
La UE
tratará a los Estados de fuera de la misma manera que a los de dentro. La
agricultura española no tendrá ninguna ventaja, dentro de la UE, frente a las
agriculturas de otros países.
Lo que uno se plantea de inmediato es para
qué demonios seguimos ahí dentro. Pero no es el momento de renegar de la
Constitución Europea, de Maastricht y de todo lo que hemos ido aprobando en los
últimos años, sino de explicar lo que viene. Por ejemplo, viene la almendra de
California. No se le pueden cerrar mercados ni imponerles aranceles, ni precios
mínimos, ni nada. Los americanos pueden meter sus almendras a pajera, y los
españoles tendrán que competir con ellos en igualdad de condiciones. Pasará lo
mismo con la alcachofa del Perú, o con toda la hortaliza de Marruecos.
La PAC no beneficia a los Estados
miembros. ¿Es que se han vuelto locos? No; simplemente, la UE prefiere abrir la
mano en agricultura y ganadería -que, total, sólo beneficia a los españoles harapientos-
y ponerse firme en otros sectores que le interesan a franceses, alemanes,
británicos, holandeses... Sacrifico la agricultura española (total, un país de mataos)
y me mantengo firme en otras cosas. Mientras nuestros Gobiernos de turno ponen cara
de circunstancias y tratan de que no se note, para no darle argumentos a la
oposición.
Medio
ambiente...
Dice la COAG que la
Región de Murcia estuvo a punto de tener que devolver 9 millones de euros de
los 41 que le asignó Europa el pasado ejercicio; para no tener que devolverlos,
se invirtió en ayuda agroambiental: se ha creado un sexto año de ayudas.
Con respeto a las medidas
medioambientales, desde la COAG se ha dado la alarma: y es que, según Miguel
Padilla y otros responsables, de la noche a la mañana muchas tierras están
sufriendo una auténtica expropiación, al aprobarse corredores ambientales que
restringen sus usos hasta convertirlos prácticamente en montes que no se pueden
tocar.
Pero de ese llamado fundamentalismo medioambiental hablaremos,
si os parece, en el próximo artículo.
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