lunes, 4 de agosto de 2014

Cruz Roja de Águilas, siempre al pie del cañón

         La Cruz Roja de Águilas ha vuelto a desarrollar un trabajo extraordinario este fin de semana. Junto a los rescates propios de una zona costera, han atendido dos accidentes de tráfico bastante graves.
         Desde su gabinete de prensa comienzan recordándonos que, en los cuatro días que llevamos del mes de agosto, ya han atendido 23 rescates.
         Algunos de ellos los han practicado fuera del horario establecido en el Plan Copla de salvamento; una circunstancia que hay que destacar: los socorristas no se quejan por las horas extra, aunque al fin y al cabo desempeñan un trabajo y tienen derechos, y más por su propia seguridad; el hecho de que atiendan con éxito las emergencias fuera del horario de vigilancia es un mérito adicional, pues supone que ellos continúan teniendo capacidad de respuesta no sólo en las horas centrales del día.
         Habría que tomar buena nota de que se están produciendo muchas incidencias fuera del horario del Plan Copla; quizás sería el momento de ampliarlo hasta las 9 o las 10 de la noche, porque en verano sigue habiendo sol y gente bañándose... claro que en este país tenemos cosas mucho más importantes en que gastarnos el dinero, como fiestas, los sueldos de más de un parásito o las obras faraónicas para que los idiotas nos den votos.
         Bueno; el último de estos 23 rescates que lleva la Cruz Roja de Águilas desde el viernes día 1 se produjo, como digo, fuera del horario del Plan Copla, y se podría haber saldado con varios fallecidos: eran ya las 9 de la noche pasadas, cuando en la playa de la Cola un hombre de 52 años fue arrastrado por la corriente mientras trataba de auxiliar a una menor de su familia.
         El primero que fue a salvarle fue un guardia civil fuera de servicio: también sabemos que la Guardia Civil y la Policía no miran el reloj a la hora de salvar vidas, y hay muchos ejemplos de agentes, padres de familia, que han perdido la vida ahogados por salvar a otras personas.
         Entre el guardia civil, y dos socorristas acuáticos del Grupo de Intervención Rápida, se logró salvar al hombre y a la menor.
         De forma paralela, los sanitarios de la Cruz Roja en tierra han atendido dos accidentes de tráfico, en los que también han participado efectivos como el 061, Servicio de Urgencias Extrahospitalarias SUE, Guardia Civil, Policía Local y Protección Civil.
         Los accidentes se produjeron la tarde del domingo:
         A las 16:15 horas, dos coches chocaron frontolateralmente en la carretera entre Águilas y Calabardina; hubo que atender a los cinco ocupantes de ambos vehículos, y llevárselo en tres ambulancias al hospital Rafael Méndez para hacerles pruebas complementarias.
         Pero las desgracias nunca vienen solas. A las 17:40 horas, mientras estaban haciendo la transferencia de los heridos –entiendo que dejándolos en el hospital de Lorca–, en la carretera RM-11 (Lorca- Águilas) volcó un coche con cinco ocupantes, tres de ellos menores. Las ambulancias aguileñas se desplazaron al instante, atendieron a los ocupantes y los llevaron al Rafael Méndez.

         En fin; una tarde dura, con una decena de heridos en menos de dos horas. Por suerte todos los fines de semana, mientras algunos descansamos, los médicos, sanitarios, conductores y técnicos de Cruz Roja, del 061, de Protección Civil... están ahí para ayudarnos. Y, por suerte, muchas veces hay algún policía fuera de servicio dispuesto a lanzarse al agua para sacarnos.


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