La Comunidad Musulmana de Lorca ha
emitido un comunicado condenando los atentados de París de hace dos semanas y
expresando su solidaridad hacia las víctimas.
Como es evidente, el hecho de que unos
asesinos se líen a tiros diciendo actuar en nombre de Alá, no quiere decir que
todos los que creen en Alá sean unos asesinos. Ni todos los vascos eran
etarras, ni todos los musulmanes son yihadistas. Al contrario; por suerte para
la Humanidad, la inmensa mayoría de la gente es buena.
Los
musulmanes lorquinos son gente que madruga para irse a trabajar al campo, a la
obra, al despacho o a la oficina. Unos vecinos más, y por regla general unos buenos vecinos, y lo digo con
conocimiento de causa porque en mi barrio debo de ser de los pocos que no tiene
la parabólica orientada hacia La Meca.
En
todos los colectivos hay miserables. Para acabar con el yihadismo hay que impedir
que esas alimañas consigan armas, muchas veces vendidas por las mismas
potencias que luego cuentan a sus víctimas civiles de cien en cien. Hay que
frenar el problema en su origen, acabando con las dictaduras como la siria. Hay
que ponérselo difícil a esos yihadistas que son aliados de la miseria y de las
pulgas; que pescan en los suburbios occidentales y siempre acaban dando con
algún resentido.
Y,
eso sí: hay que acabar con el complejo de que todas las culturas y todos los
valores merecen la misma protección. No es así. En MI casa se come vestido, y a
las dos de la tarde. Si vienes a comer a mi casa, tendrás que vestirte y
hacerlo a las dos. Si yo voy a tu casa, tendré que comer en bolas y a las cinco
de la mañana.
Occidente
es una sociedad libre, laica, igualitaria. O al menos somos muchos los que
tratamos de que sea así. No lapidamos a los homosexuales, no envolvemos en
burkas a las mujeres, no castigamos a quienes no creen en el dios mayoritario.
Quien pretenda instalarse en Europa tendrá que aceptar estos valores, y por suerte la gran mayoría de musulmanes lo entienden así y aceptan esta escala de valores. El Islam no es ignorancia y fanatismo; hay de todo, como en las demás religiones. El peligro son los yihadistas que nos ven con odio... y se vienen hasta aquí para luchar. Hijo, para eso más te vale quedarte en tu casa. Puedes
creer en Alá; pero si tratas de imponerme a Alá, de castigar a los gays o de
discriminar a las mujeres, tendrás que marcharte de este territorio. Sin
complejos. Eso no nos convierte en intolerantes: nos enseña a reprimir la
intolerancia.
Y
dicho esto, vamos con el comunicado de nuestros vecinos musulmanes.
La Comunidad Musulmana de Lorca condena los atentados
de París, y se solidariza con los familiares de las víctimas
27 de
Noviembre de 2015
El
pasado 13 de Noviembre, Francia sufrió unos deleznables y trágicos atentados,
que costaron la vida a más de 120 personas. Unos atentados que se produjeron en
el corazón de Francia (Paris), protagonizados por individuos que, movidos por
la sinrazón y alentados por el fanatismo, atentaron contra la paz y la libertad
de los demócratas.
Por
ello, desde la Comunidad Musulmana de Lorca, hacemos este comunicado, para
mostrar nuestro rechazo a cualquier tipo de violencia, y contra cualquier tipo
de atentados, especialmente los ocurridos en Francia el pasado 13 de Noviembre,
así como mostrar nuestra solidaridad con las familias de las víctimas.
La
Comunidad Musulmana de Lorca alzamos nuestra voz para reafirmar nuestro
compromiso con la cultura de la Paz, siempre en búsqueda de una sociedad justa,
tolerante y unida.
Desde
la Comunidad Musulmana de Lorca consideramos que estos trágicos atentados de
ninguna manera pueden ser justificados por la religión, por lo que no podemos
más que expresar nuestro rechazo a lo trágicamente acontecido, sabiendo que
ninguna religión puede ser motor del terror y de la violencia.
Para
finalizar, desde la Comunidad Musulmana de Lorca, siendo ésta una de las más
extensas presentes en España, queremos que se haga extensible el mensaje de nuestro
ánimo de seguir trabajando para que no se dañen las relaciones sociales, de
convivencia y cordialidad que mantenemos en Lorca. Estamos convencidos de que
todas las religiones, lejos de los fanatismos y entendidas correctamente, son y
deben ser promotoras de la convivencia, la paz y la libertad.